CENTENARES DE VECINOS EN LA FIESTA EN CONTRA DE LA SUBESTACIÓN
A pesar de lo inestable del día en cuanto al tiempo, los vecinos de Parque Goya acudieron a la
Fiesta del Parque de los Tapices en contra de la subestación eléctrica, con motivo de las
1ª Jornadas de Educación Ciudadana de Parque Goya “Ecología y Salud”, celebrada el domingo 10 de mayo.
La Coordinadora de Afectados que organizaba el acto, dentro de la cual está integrada la Asociación de Vecinos Parque Goya, consiguió aglutinar a varios centenares de asistentes. Para el día de hoy se había preparado una Manifiesto que incluía todas las demandas y preocupaciones sobre este asunto, y que apoyaron muchos vecinos con su firma, y que tenía el objetivo de que fuera adscrito por entidades de todo tipo ajenas al barrio para recibir más apoyos. Pero la convocatoria también atrajo a lo largo de la jornada a representantes políticos del PP y de CHA, que mostraron su apoyo la causa. También se recibió la visita de la presidenta del Distrito Actur-Parque Goya, Pilar Alcober, en el tramo final de la fiesta. Con ella se realizó una visita al barrio y se puso al corriente a la nueva presidenta la situación en Parque Goya con la amenaza de la subestación. Su interés fue maniesto, y a pesar de comentar que la instalación eléctrica cumple con la normativa actual, se comprometió a tratar el tema para comenzar un dialógo con Endesa y buscar una solución dialogada al asunto. Y tampoco faltaron los medios de comunicación que se hicieron eco de otra jornada festiva y reivindicativa en Parque Goya.
La fiesta comenzó a mediodía, al ritmo de la música, mientras en la barra ya se empezan a servir las primeras cañas. Pronto empezó a impregnarse el parque del típico olor a fiesta del chorizo y panceta a la brasa, imprescindible en cualquier fiesta al aire libre que se precie. Los primeros en hacer acto de presencia fueron los gaiteros de
“Os Boques”, los cuales comenzaron a rondar por el parque, e inundaron con las notas musicales aragonesas la fiesta.
Alrededor del escenario montado desde primera hora se podía jugar de manera libre a
juegos tradicionales aragoneses como bolos, lanzamiento de anillas o la rana.
Pronto aparecieron en escena dos
barcas hinchables, y el lago se convirtió en el protagonista de la fiesta. La cola para poder navegar en el lago, el emblema del parque de los Tapices, fue numerosa en toda la mañana.
La posibilidad de poder montar en la barca gustó mucho a la gente, sobre todo a los más peques. Esta atracción se prolongó hasta la hora de la comida, y tras un principio de naufragio de una de las barcas la gente comenzó a remojarse, y poco después a bañarse. Nuestro lago se convirtió en una improvisada piscina en la que un grupo numeroso de niños y no tan niños se lo pasaron de lo lindo.
Volviendo a la programación prevista, sobre la una el grupo de
Scouts “El Rabal” colaboró en esta jornada festiva con la organización de juegos relacionados con el agua. A los participantes no les importó mojarse, y de hecho el tiempo continuaba permitiendo que todo siguiera según lo previsto.
Poco después entró en acción el
Taller de reciclaje CaleI2copio. Un grupo numeroso de padres y niños recibió las sencillas indicaciones para convertir material de desecho, latas y tetra-brick, en monederos, cestas o ceniceros. Llegó la hora de comer, y justo antes una actuación improvisada se convirtió en el momento más recordado por muchos de los presentes. Una espontáneo subió al escenario y acompañado de un grupo numeroso de niños realizó unas coreografrías con mucha marcha, y que animaron mucho a los asistentes. Llegó la hora de la
comida popular. Mucha gente ya venía preparada con mesas o mantas, para comer en el parque. Los menos preparados disponían de los bocadillos que se vendían en la barra. Todo fue perfecto hasta que justo después de los postres, la tormenta se convirtió en la protagonista de la jornada. Al igual que ocurrió con la fiesta celebrada en el parque el año pasado con el mismo motivo, a la misma hora obligó a desalojar el parque, con su amenazante lluvia. Hubo que recoger rápido todo, y tras el chaparrón el resto de la tarde la organización mantuvo su ánimo, no faltando el tradicional café con postres caseros y la partida de guiñote incluída, mientras se comentaba la mala suerte con el tiempo y lo bien que había salido la mañana festiva, a pesar de haber tenido que suspender los actos de la tarde. Un sabor agridulce, pero con ello no se perdía ni mucho menos el ánimo en la lucha para que la subestación eléctrica se alejase definitivamente de
nuestro barrio, Parque Goya.
Gracias a la Asociación de Vecinos "Parque Goya" por esta
crónica y las fotos.